#8 Cómo escribir un libro (y terminarlo) en 6 pasos
¿Quieres escribir un libro y no sabes por dónde empezar?
Te ofrezco una pequeña guía para que conozcas los pasos básicos que tienes que dar para escribir y publicar un libro.
Cada una de ellas será tratada por separado en futuros artículos en este espacio, así que te recomiendo que te suscribas a Escribe y Publica para estar al día.
Son muchas las razones por las que desees escribir un libro, desde potenciar tu marca personal, hasta dar a conocer tu testimonio al mundo, mostrar tus conocimientos, contar una historia que pide paso en tu cabeza, apoyar el contenido de tus formaciones, entre otras.
O por simple placer, por el gusto de hacerlo y tener la experiencia de enfrentarte al reto de escribir y publicar un libro.
Si tienes ese sueño, te cuento cómo pasar a la acción:
¿Cómo empezar? ¿Abro un documento en mi ordenador y me pongo a escribir?
A menudo, cuando en una asesoría cuento todo lo que hay que hacer desde que tienes la idea hasta que publicas, la aspirante a autora se desinfla y pierde el interés.
Para que esto no te ocurra, te voy a dar esta pequeña guía. No desesperes porque, además, puedes acudir a mentores, cursos o grupos de escritores en los que encontrarás el apoyo necesario durante todo el proceso.
Piensa que hasta los escritores más famosos tuvieron dudas, sufrieron el síndrome del impostor y pensaron en dejarlo en algún momento. Cada uno sigue su proceso y han trabajado en ello hasta conseguir su propio método. Porque no hay uno solo.
Al final, solo una cosa realmente importa cuando se trata de escribir libros: terminar.
Bueno, dos: y disfrutar del proceso.
Para empezar, sigue estos cinco pasos básicos:
1. El comienzo
Es lógico, a escribir un libro se empieza por el principio. Pero, ¿cuál es ese principio? No necesariamente tiene que ser la introducción o el capítulo 1.
Por comienzo me refiero a esa idea que te hizo click, a eso que te hizo ver que ahí había un libro, esa fuerza impulsora que te llevó a planteártelo.
Te sorprendería saber que algunos autores comenzaron por el final o por una escena central que les llegó un día a la mente de manera casual.
El comienzo es la semilla que decidiste plantar y que ahora quieres hacer crecer.
¿Qué te mueve a ti? ¿Por qué te lo has planteado? Escribe los motivos, la intención, el comienzo del proceso.
2. Elige tu lector
Por más que quieras vender millones de copias, no puedes dirigirte a toda la humanidad. Escribe para una persona, real o ficticia. Tenla en tu mente y dirígete a ella en cada palabra que escribas. No solo darás credibilidad a tus textos sino que te ayudará a no dispersarte. Porque es imposible dar gusto a todo el mundo y ya sabes que tendrás tanto fans como detractores.
Elige esa persona que sabes que necesita tu mensaje, a quién puedes y quieres ayudar o que disfrutará con tu historia.
Para definirla, escribe sobre ella: edad, sexo, situación económica, profesión, hijos, estado civil, físico, nombre… Haz su ficha igual que los escritores hacen la ficha de sus personajes de ficción, con fotografía o dibujo incluido si es posible. Hazlo ahora, después del ejercicio anterior sobre el comienzo.
Y cuando te estanques con un capítulo o no estás segura de si tu mensaje se entiende o es útil, etc., ponte en su piel. Visualiza a tu lector ideal leyendo tu libro y qué le estás transmitiendo.
Tener claro quién es tu lector objetivo te facilitará la fluidez al escribir.
3. Ten claro cómo terminar tu libro
O lo que es lo mismo: ten un plan. Ponerte a escribir sin más no suele ser buena idea, aunque seas brújula. Por poco que te guste planificar capítulo a capítulo, es necesario que tengas una idea de dónde quieres llegar.
Necesitas una hoja de ruta para no dispersarte y empezar con una idea para terminar con otra. Si ocurre, que suele hacerlo, que sea dentro de un orden y con coherencia.
En tu hoja de ruta debe caber la flexibilidad, la improvisación y los cambios. En estos casos, revisa para que toda la obra tenga coherencia.
En ficción se distingue entre escritor brújula y escritor de mapa según se planifique más o menos. Ahora se habla de uno más: el paisajista, que es un híbrido entre los dos.
Elige tu propio método. Yo me considero de brújula, lo que hace que tenga que revisar más veces y completar el texto durante las revisiones.
Sin embargo, cuando se trata de no ficción, cuánto más compleja sea la idea de tu libro, más deberías dedicar un tiempo a planificar y tener la documentación preparada.
4. Escribe
Sí, ya sé que escribir es lo que quieres. No esperes a tener todo y saber todo para hacerlo. Porque eso es un reflejo del síndrome del impostor. Sé de gente que siempre quiere hacer un curso más: de escritura creativa, de diálogos, de gramática, de venta o de la materia de la que parte su libro. Si bien la documentación es importante y el aprendizaje más, hay un punto en el que debes parar y ponerte a escribir. De lo contrario, nunca terminarás el libro.
En el proceso de escritura no hay atajos. Es un trabajo artesano que debes hacer palabra a palabra. Además, es un proyecto que puede alargarse sin límite si no te pones una fecha tope.
Para que tus momentos de escritura sean productivos puedes aplicar técnicas como la de escribir por bloques, evitar las distracciones, no pararte a revisar en cada frase, saber qué vas a hacer en cada sentada, llevar un registro de palabras, etc.
Crea una meta que te sirva a ti y se ajuste a tus circunstancias personales. Hazte un plan para cumplir con tus objetivos. Si te bloqueas con un capítulo, intenta seguir por otro lado o dedica el tiempo previsto a otro aspecto de la escritura que no sea escribir propiamente dicho (documentar, hacer crecer tu comunidad, investigar…).
5. Edita
Cuando tengas tu primer borrador, aún no tienes un libro. Ahora empieza la aventura: haz tu revisión inicial, lee, toma notas y reescribe (te iremos contando cómo en las próximas semanas).
Tu primer borrador puede darte una satisfacción enorme por el trabajo realizado, ya has conseguido la primera meta, o todo lo contrario. A veces nos parece que lo escrito no vale nada, o poco, y te desanimes. Déjalo reposar unos días y vuelve con el manuscrito cuando hayas podido poner distancia. Con el tiempo verás que sí es un producto que tiene posibilidades si lo pules. Revisa, reescribe y cuando lo tengas todo de nuevo, busca lectores beta que te ayuden a ver lo que tú ya no ves.
Un ejemplo del proceso (que varía de unos autores/libros a otros):
Primer borrador: El texto está en bruto y, como sería mi caso, lleno de anotaciones.
Segundo borrador: A partir de las anotaciones y de la lectura, añades detalles e información que complete lo ya escrito. También es le momento de recortar si en algún punto te has excedido o repetido. En mi caso, decido qué cuadros, esquemas, gráficos… voy a incluir y dónde.
Tercer borrador: Nueva lectura para pulir, fijarte si hay coherencia, si el mensaje es adecuado y fiel a tu objetivo. Si crees que este borrador ya se asemeja al libro que quieres publicar, es el momento de pasarlo a tus lectores cero.
Cuarto borrador: Revisión en la que incluyes las apreciaciones de tus lectores cero. Con este borrador ya puedes pasarlo a corrección.
Revisión de correcciones para obtener el manuscrito a publicar. Con las correcciones, que supone de dos a tres vueltas al texto, elaboras un nuevo borrador que puede ser el definitivo, el que pases a maquetación.
Galeradas: Una vez maquetado, tendrás que hacer una nueva revisión para fijarte si no se cuela ninguna errata y todo cuadra como debe.
A pesar de todas las revisiones, date cuenta de que un libro nunca es perfecto. Que esto no te haga sufrir. Hay autores que tienen problemas en poner el fin, pero hay que hacerlo.
5. Publica y promociona
Esta fase es otro proyecto en sí misma. Primero debes decidir si quieres autopublicar o enviar tu manuscrito a una editorial (en ese caso no hace falta que lo maquetes).
No importa si vas con editorial o autopublicas, debes dedicar tiempo a la promoción, tanto en redes sociales como desde tu web y buscando presentaciones, reseñados, etc.
El proceso de escribir un libro es sencillo, pero escribirlo no es fácil. Si buscas fórmulas mágicas, solo hay una: escribir.
Hazlo. Tú puedes. Solo tienes que empezar. Siéntate, abre un documento nuevo en el ordenador, y escribe.
Para lo demás, no te agobies que podemos ayudarte. Escríbenos a escribepublica@gmail.com y cuéntanos qué necesitas.
Mientras tanto, sigue aprendiendo en este espacio que hemos creado para ti:
Pilar NC
EyP